Dos teléfonos celulares, la historia clínica de Diego Armando Maradona y 12 recetas a su nombre fueron secuestradas hoy en la casa de la psiquiatra que lo atendía antes de su muerte, quien fue notificada como posible imputada en la causa en la que se investigan las circunstancias del fallecimiento de exfutbolista, informaron fuentes judiciales y su abogado defensor.
Se trata de Agustina Cosachov, quien de esta manera se convirtió en la segunda profesional de la salud que está siendo investigada en el marco del expediente, al igual que el neurocirujano Leopoldo Luque.
Los procedimientos fueron encabezados por dos de los cuatro fiscales de San Isidro que llevan adelante el expediente y realizados por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, con apoyo de Policía de la Ciudad, en el barrio porteño de Palermo.
El primero de los allanamientos fue en el domicilio particular de la profesional, en un edificio de la calle Guise y su cruce con Paraguay, supervisado por el fiscal general adjunto de San Isidro, Patricio Ferrari.
Allí, los investigadores secuestraron dos teléfonos celulares, la historia clínica del “10” y 12 recetas a su nombre, como así también una tablet y una notebook, cuyo contenido ahora será analizado por los pesquisas.
El otro procedimiento fue dirigido por la fiscal de Benavídez, Laura Capra, y se desarrolló en el consultorio de la psiquiatra, ubicado a tan solo cinco cuadras de su vivienda particular, en la calle Soler y Medrano, pero según los investigadores el resultado fue negativo.
Fuentes judiciales indicaron a Télam que al momento de iniciar los allanamientos, Cosachov no se encontraba en ninguno de los dos sitios, pero más tarde se presentó en su casa de la calle Guise junto a su abogado, Vadim Mischanchuk, especialista en procesos penales por mala praxis.
Si bien el día del fallecimiento de su paciente, a Cosachov se le tomó una declaración testimonial porque fue una de las personas presentes en la casa del country San Andrés, de Tigre, hoy su situación cambió.
Los investigadores le leyeron los “derechos y garantías” contemplados para los imputados en los artículos 60 y 162 del Código Procesal Penal bonaerense, entre ellos, poder poner un defensor, no estar obligada a declarar contra sí misma y poder presentarse para una declaración espontánea.
Si bien aún no hay elementos para citarla a una declaración indagatoria por un delito concreto -aunque el juez de Garantías ya tipificó el hecho de manera provisoria “homicidio culposo-, los fiscales le explicaron a Cosachov que su actuación era objeto de esta investigación.
“El fiscal me hizo saber que ella está siendo investigada, es decir que en términos procesales es que está imputada. Cuando termine la medida, me presentaré en la fiscalía para tomar contacto con la causa y poder poner peritos de parte”, anunció Mischanchuk al canal TN.
Si bien aclaró que aún no habló con su clienta de los pormenores del tratamiento médico de Maradona, Mischanchuk remarcó que en este caso “se indicó una internación domiciliaria con todos los requisitos que el paciente en ese momento necesitaba; si se cumplió o no es materia de esta investigación”.
“Hay una tranquilidad por parte de mi asistida respecto a las decisiones médicas que tomó”, agregó el abogado.
Los fiscales hicieron hoy con la psiquiatra lo mismo que el domingo pasado cuando allanaron la casa y el consultorio del médico neurólogo del “10”, Leopoldo Luque, por lo que secuestraron teléfonos celulares, computadoras y documentación medica referida al paciente.
Cosachov, junto a Luque, son los profesionales médicos que firmaron la externación de Maradona el pasado 11 de noviembre de la Clínica Olivos luego de su cirugía de un hematoma subdural en el cerebro, y quienes reportaban sobre las cuestiones de salud a la familia.
Los fiscales tienen en la mira su actuación y responsabilidad en la internación domiciliaria armada en la casa del country San Andrés, de Tigre, donde el exjugador y entrenador murió el miércoles pasado de un edema agudo de pulmón producto de una cardiopatía severa.
Uno de los investigadores judiciales de la causa aseguró ayer a Télam que tras los elementos recabados en esta primera semana de investigación, los fiscales creen que la atención de Maradona en el country San Andrés era “totalmente deficiente” y consideran que la supuesta internación domiciliaria era “un descontrol total y absoluto”.
Por otra parte, Rodolfo Baqué, abogado de la enfermera Dahiana Gisela Madrid, quien cuidaba al exfutbolista, estuvo el día de su fallecimiento y ya declaró en dos oportunidades, pero como testigo en el expediente, se presentó hoy en la Fiscalía de General de San Isidro para “aportar pruebas”.
Entre ellas, el letrado mencionó “audios de un chat” donde, según dijo, “hay una serie de conversaciones reveladoras de todo lo que acontecía en el día a día de la situación de Maradona”.
En tanto, mañana comenzarán los peritajes complementarios a la autopsia, ordenados sobre la sangre, la orina, los hisopados, el pelo, tejidos y hasta el corazón completo de Maradona.
Se trata de los estudios toxicológicos, mediante los cuales se buscará determinar si Maradona tenía rastros de haber consumido alcohol, drogas o alguna otra sustancia en las horas previas a su muerte, y de los histopatológicos, que son aquellos que estudian en forma microscópica los órganos y tejidos.
La mayoría de los peritajes comenzarán mañana a las 8 en la sede central de la Superintendencia de Policía Científica de la policía bonaerense en la ciudad de La Plata, ubicada en avenida 52 y calle 117, mientras que otros se harán en los laboratorios del Cuerpo Médico Forense (CMF) dependiente de la Corte Suprema de Justicia.
La prepaga de Maradona sugirió una internación
La empresa de medicina prepaga que tenía contratada Maradona había considerado que, si bien el exfutbolista podía ser externado de la Clínica Olivos tras la neurocirugía, no había recibido el alta médica y sugería continuar con el tratamiento en un centro de rehabilitación.
De acuerdo al acta de egreso titulada “Continuidad Terapéutica de DM al egreso de la Clínica Olivos”, firmada el 11 de noviembre pasado e incorporada al expediente judicial que investiga las circunstancias de la muerte de Diego, la propuesta realizada por la empresa de medicina prepaga Swiss Medical no fue aceptada por los familiares de Maradona, por lo que se decidió la internación domiciliaria.
“Considerando que DM ha tenido una evolución posquirúrgica favorable y se encuentra en condiciones de externación, es necesario establecer la continuidad del tratamiento, ya que si bien puede ser externado no se encuentra de alta médica”, dice el escrito firmado por Gianinna y Jana Maradona, dos de las hijas del “10”, el médico Leopoldo Luque y el director médico de la Clínica Olivos, Pablo Dimitroff.
En otro de los párrafos del escrito, al que tuvo acceso Télam, la prepaga sugiere “continuar el tratamiento psiquiátrico clínico, de rehabilitación y toxicológico bajo la modalidad de internación en un centro de rehabilitación, con un equipo de psiquiatría de apoyo”.
En ese sentido, Swiss Medical “gestionó la institución de rehabilitación y los profesionales con el objetivo de acordar la mejor estrategia terapéutica”.
Sin embargo, según el escrito, la familia, junto a Luque y a la psiquiatra Agustina Cosachow, propuso una atención médica domiciliaria de Maradona.
“El equipo médico tratante del señor DM prescribió, y la familia aceptó, el seguimiento y atención médica domiciliaria del paciente y solicita a Swiss Medical acompañamiento con cuidados domiciliarios consistente en asistencia diaria de enfermería y acompañante terapéutico”, dice el acta de egreso.
En el escrito, consta que “para el cuidado en domicilio se debe contar con el acompañamiento familiar al momento de la prestación de los servicios” y que “el seguimiento médico queda a cargo del equipo médico tratante y de los profesionales elegidos por el paciente y su familia, ajenos a Swiss Médical”.