Con el cambio de aire, el Tottenham concretó su pase a octavos de final de la Champions League de la mano de José Mourinho y de un alcanzapelotas que fue clave en la remontada de 0-2 a 4-2 en poco más de 30 minutos del conjunto inglés ante el Olympiacos.
El técnico portugués fue el elegido para reemplazar a Mauricio Pochettino, que suena como uno de los principales candidatos a sumarse a las filas del Bayern Múnich, y debutó en el banco de los Spurs el sábado último con un triunfo 3-2 en la cancha del West Ham.
Pero el partido de Champions se puso cuesta arriba de entrada para los dirigidos por Mou. El marroquí Youssef El Arabi, con un disparo raso y potente, y el portugués Ruben Semedo, pusieron por delante al conjunto visitante en apenas 20 minutos.
La picardía del alcanzapelotas
Justo antes del descanso (45+1), Dele Alli aprovechó un error para marcar e irse al descando a tan solo un gol de igualar el encuentro. Así fue como en apenas cinco minutos del complemento, Harry Kane marcó el empate. Pero el delantero inglés contó con la ayuda del alcanzapelotas.
Y es que la jugada del empate se gestó ante el pedido expreso de Mourinho a un alcanzapelotas que, al grito de “go, go, go” (vamos, vamos, vamos)” jugó rápido la pelota para que el lateral se hiciera a suma velocidad, lo que le permitió a Lucas Moura conectar un centro para que Kane pusiera el encuentro igualado. Luego de la acción, el propio Mourinho fue a buscar al joven, a quien lo felicitó con un apretón de manos que se viralizó en las redes.
Finalmente, el marfileño Serge Aurier estableció el 3-2 a falta de 15 minutos para el final y luego Kane completó su doblete para marcar 4-2. Con este resultado el Tottenham de Mou alcanzó la siguiente fase de la Champions League, algo que se esperaba dado que el equipo inglés viene de alcanzar la final de esta competencia a mitad de este año, la cual perdió a manos del Liverpool por 2 a 0.