Defensa y Justicia voló tan alto como un ‘Halcón’ y se consagró campeón de la Recopa Sudamericana, al vencer a Palmeiras por 4 a 3 en la definición por penales, luego de que igualó la llave al imponerse 2-1 en los 120 minutos de juego en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.
La entidad de Florencio Varela alcanzó así su segundo título internacional, en menos de tres meses. Ya que en enero pasado había conquistado la Copa Sudamericana, al vapulear en Córdoba y por 3-0 a Lanús, con la conducción técnica de Hernán Crespo, que ahora dirige al San Pablo.
En tanto, el actual entrenador Sebastián Beccacece consiguió su primer título como DT principal en el fútbol profesional.
En el partido, Raphael Veiga marcó la apertura, de tiro penal, para Palmeiras en el primer tiempo. Braian Romero y Marcelo Benítez, uno en cada tiempo le dieron el triunfo a Defensa, en los 90 minutos reglamentarios, lo que obligó al alargue de 30 y la definición por penales.
En la serie decisiva convirtieron para Defensa Adonis Frías, Miguel Merentiel, Eugenio Isnaldo y Enzo Fernández. Para Palmeiras lo hicieron Gabriel Menino, Gustavo Gómez y Rony, mientras que marraron Luiz Adriano y el arquero Weverton.
Defensa, como era de prever, apareció con gran ímpetu, dándole intensidad a sus acciones en procura de revertir el 2-1 en contra en el partido de ida, para poder adueñarse de la Recopa
En ese protagonismo, el campeón de la Copa Sudamericana contó con chances peligrosas para el arco local, a la vez que sufría algunas cargas de contraataque que ejercía Palmeiras.
Así fue como el titular de la Libertadores pudo ponerse en ventaja porque tras una veloz corrida de Rony, Fernando Meza lo derribó en el área y el correspondiente penal lo convirtió Veiga, con un tiro bajo y a la derecha de Ezequiel Unsain. (22m.).
Pese a ello, el ‘Halcón’ no se amilanó y con rapidez reaccionó para buscar la igualdad, sin perder su estilo de juego, intenso, con posesión de la pelota y rotaciones continúas.
Lo que le dio la merecida igualdad, con un desborde por derecha de Francisco Pizzini, con un centro atrás que conectó muy bien Romero para vencer a Weverton (30m.).
A partir de allí, Defensa alcanzó tranquilidad y firmeza en su accionar, generando un par de situaciones propicias en forma consecutiva (36m).
Primero, con un remate muy violento de Enzo Fernández, que alcanzó a desviar el guardavalla local, y en la continuidad de la jugada, Marcelo Benítez la terminó con un tiro alto y violento, que Weverton pudo desviar al córner por sobre el travesaño, con sumo esfuerzo.
Al final de la etapa inicial, los de Florencio Varela terminaron predominando en el desarrollo, con la intención de darlo vuelta en el segundo capítulo.
Con similares características comenzó el complemento, donde pronto el ‘Verdao’ contó con una buena ocasión, sacando provecho de algunas ventajas defensivas que exponía el elenco bonaerense.
Una entrada por derecha de Rony, cuyo remate pudo ser contenido por Unsain junto al caño izquierdo de su arco (3m.) casi origina el desnivel.
Instantes después, la superioridad que empezaba a ejercer Defensa estuvo a punto de concretarse en el marcador. Pero Romero (6m.) y un tiro de esquina de Benítez (11m.) que casi se convierte en olímpico mostraron que el equipo visitante estaba cerca.
Más tarde, el que se destacó fue Unsain al tapar otro violento tiro en una nueva carga de Rony, el que más complicaba a la defensa visitante.
Al promediar al etapa final, el representativo paulista quedó con un jugador menos por la expulsión del lateral izquierdo Matías Viña, al pegar un patadón en la espalda de Adonis Frías, cuando ambos cayeron en un forcejeo.
Esa sanción del árbitro González, de flojo desempeño, se concretó por la intervención del VAR. como había sido al principio con el penal de Palmeiras.
Y después volvió a intervenir para el segundo penal a favor de Palmeiras, en tiempo suplementario, al que llegaron por el golazo de Benítez al final de los 90 minutos reglamentarios.
En el primer tiempo del suplementario, cuando fue sancionado el penal en contra de Defensa, que instantes previos no le habían cobrado un penal a su favor por un manotazo del paraguayo Gustavo Gómez, se originó un serio incidente entre jugadores de ambos equipos y asistentes del cuerpo técnico del ‘Verdao’, que terminó con la expulsión de Romero, del ‘Halcón, y de un particular cercano a los suplentes locales.
A todo esto, Unsain que había cometido un penal innecesario, se reivindicó al contener la ejecución de Gómez (9m. PTS).
Ya los dos equipos con un hombre menos, el alargue fue equilibrado, en el que ninguno pudo ser más profundo, acusando cansancio y pocas ideas.
La definición por penales coronó el sueño de Defensa, con justicia por su mayor esfuerzo y mejor juego y lo que desató el alocado festejo de todos los jugadores y el cuerpo técnico.